lunes, 8 de octubre de 2012

"Pequeña maldad" en Gernika


El sábado pasado, 6 de octubre, fuimos a Gernika (antes se llamaba Guernica) a unas charlas de baloncesto por la mañana y unos partidos por la tarde.

No sabíamos que Gernika estaba en fiestas, así que nos sorprendió mucho encontrarnos con unos festejos ecologistas: la fiesta de los zerníkalos (casi todo el mundo llevaba unas camisetas que ponía Gernikako Jaiak).
Entre conferencias y contiendas enfrentando equipos femeninos de Salamanca y de la propia Gernika, unas buenas sidras y una agradable comida culminada por un buen gin kas nos llenaron de inspiración.
Así que decidimos visitar la Casa de Juntas (clara paradoja llamarle de Juntas cuando todo el mundo allí se quiere separar).
Tras tomar unas fotos de los dos árboles, el fósil y su retoño de poco futuro de tan escuchimizado que está, entramos en el salón de plenos donde se insulta al rey. Pero el tal Juan Carlos ni estaba ni se le esperaba. Tampoco pudimos encontrar un elefante disecado.
Justo al lado del edificio de los junteros, accedimos a un museo de cultura vasca, donde buena parte de mapas y otras piezas expuestas correspondían a Navarra (por lo visto, distinta de la foral y española en la que habitamos). Casi al abandonarlo nos encontramos con el libro de visitas: que si magnífico museo, que si muy bien descrita la cultura vasca... En mi maldad, no pude por menos, y amparado en mi anonimato y cobardía ya que no había nadie alrededor, escribí literalmente: "pequeño error, Navarra no es Euskadi". Por si acaso, salimos corriendo, no vaya a ser que alguién leyera mi mensaje y quisiera agredirme.
Los navarricos somos así de salvajes.